domingo, 8 de febrero de 2015

“No vamos a cambiar el mundo si no cambiamos la educación”

 

05/02/2015 18:00

 

(RV).- Esta tarde en el Aula nueva del Sínodo, Papa Francisco participó en la ceremonia de clausura del IV Congreso Mundial Educativo de Scholas Occurrentes, que tuvo lugar estos días en el Vaticano sobre el tema: "Responsabilidad social educativa".

 

 

Mensaje del Papa Francisco para la Clausura del IV Congreso de Scholas

 

En primer lugar, les agradezco el esfuerzo que han hecho ustedes para participar de este IV Congreso, les agradezco los aportes que nacen de la experiencia.

 

Una cosa que me preocupa a mí mucho, es lograr armonías, que no es simplemente lograr compromisos, lograr arreglos, lograr entendimientos parciales. Armonía es de alguna manera crear entendimiento de diferencias, aceptar las diferencias, valorar la diferencia y dejar que se armonicen que no se fragmenten.

 

El mensaje que escuchamos de parte de la Lumsa recordaba una frase mía, no vamos a cambiar el mundo si no cambiamos la educación, y hay algo que está totalmente desarmonizado. Yo pensaba que era solamente en América Latina, o en algunos países de América Latina, que era lo que más conocía en el mundo, es el pacto educativo; pacto educativo que se da entre la familia, la escuela, la patria, la cultura está roto y muy roto, y no se puede pegar. El pacto educativo roto significa que sea la sociedad, sea la familia, sean las diversas instituciones delegan la educación a los agentes educativos, en los docentes que generalmente mal pagados tienen que llevar sobre sus espaldas esta responsabilidad y si no logran un éxito se les recrimina, pero nadie recrimina a las diversas instituciones que han claudicado el pacto educativo, lo han delegado a la profesionalidad de un docente. Quiero rendir homenaje a los docentes, porque se han encontrado con esta papa caliente en la mano y se han animado a seguir adelante.

 

Scholas quiere de alguna manera reintegrar el esfuerzo de todos por la educación, quiere rehacer armónicamente el pacto educativo, porque solamente así, si todos los responsables de la educación de nuestros chicos y jóvenes nos armonizamos podrá cambiar la educación y para eso Scholas busca la cultura, el deporte, la ciencia; para eso Scholas busca los puentes, sale de lo pequeño y va a buscarlos más allá y hoy día está manejando en todos los continentes esta interacción, este entendimiento. Pero además lo que busca Scholas es armonizar la misma educación de la persona del chico, del muchacho, del educando, no es solamente buscar información, el lenguaje de la cabeza, no basta. Scholas quiere armonizar el lenguaje de la cabeza con el lenguaje del corazón y el lenguaje de las manos. Que una persona, que un chico, que un muchacho piense lo que siente y lo que hace, sienta lo que piensa y lo que hace, haga los que siente y lo que piensa; esa armonía en la misma persona en el educando y esa armonía universal de tal manera que el pacto educativo lo asumimos todos y de esa manera sacamos de esta crisis de la civilización que nos toca vivir, ¿no? Y damos el paso que la misma civilización nos exige, cada uno de los pueblos que integran Scholas tienen que buscar en su tradición histórica, su tradición popular las cosas fundacionales, ¿cuáles son las cosas que culturalmente son fundacionales a la patria? Y desde eso que le dio sentido a esa patria, a esa nación sacar la universalidad que armoniza. La cultura italiana por ejemplo no puede renegar de Dante como fundacional, la cultura Argentina que es la que conozco, no puede renegar de Martin Fierro, nuestro poema fundacional, me viene las ganas de preguntar, pero no lo voy hacer, ¿cuántos argentinos aquí presente han estudiado, leído, meditado a Martin Fierro?

 

Volver a las cosas culturales que nos dieron sentido, que nos dieron la primera unidad de la cultura nacional de los pueblos, recuperar lo que es más nuestro cada uno de los pueblos para compartirlos con los demás y armonizar lo más grande, eso es educar para la cultura. Además hay que ir a buscar lo fundacional de la persona, la sanidad fundacional, la capacidad lúdica, la capacidad creativa del juego. El libro de la Sabiduría dice que: "Dios jugaba, la sabiduría de Dios jugaba", redescubrir el juego como camino educativo, como expresión educativa. Entonces ya la educación no es meramente información, es creatividad en el juego, esa dimensión lúdica que nos hace crecer en la creatividad y en el trabajo en conjunto.

 

Finalmente, buscar en cada uno de nosotros en nuestros pueblos la belleza, la belleza que nos funda con nuestro arte, con nuestra música, con nuestra pintura, con nuestra escultura, con nuestra literatura, lo bello. Educar en la belleza, porque armonía dice belleza y no podemos lograr la armonía del sistema educativo, sino tenemos esa percepción de la belleza.

 

Yo les agradezco todo lo que ustedes hacen y como colaboran en este desafío que es creativo, creativo del pacto educativo, recrearlo porque así recreamos la educación. Creativo de la armonía de la persona entre los tres lenguajes: el de las manos, el del corazón y el de la mente. Creativo en la dimensión lúdica de una persona que saben perder el tiempo en el trabajo conjunto del juego, creativo en la belleza que ya encontramos en los fundamentos de las identidades nacionales que estamos todos juntos. Este es el desafío, ¿quién invento esto? No se sabe, pero se dio. ¿Hay problemas? Muchos, muchos todavía que solucionar en la organización de esto. ¿Qué somos tentados? Sí. Toda obra que empieza es tentada, es tentada de frenarse, de corromperse, de desviarse, por eso es necesario el trabajo conjunto y la vigilancia de todos, para que esta chispa que nació siga extendiéndose en un fuego que ayude a reconstruir, a armonizar el pacto educativo, los que gana en todo esto son los chicos. Así que les agradezco por lo que hacen por el futuro, porque decir chicos, es decir futuro. Muchas gracias.

 

(Transcripción para Radio Vaticano – Renato Martinez)


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"DIOS TE SIGA BENDICIENDO"

Mg.e. Martín Linares Chavarría
Celular: 992453731
 

1 comentario:

  1. Muy cierto. La educación es producto del sistema. Mientras éste no cambie la educación será un eco. Pero como decía Paulo Freire, no educamos para cambiar al mundo sino a las personas que lo van a cambiar. Esa es nuestra apuesta.

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